Tailwind: Tu estación de hidratación personal

Con demasiada frecuencia, en los deportes de resistencia, los atletas se centran tanto en su ingesta de calorías y electrolitos que olvidan el componente más esencial: el agua. Una hidratación adecuada desempeña un papel fundamental en el suministro de oxígeno, hormonas y nutrientes a nuestras células. ¿Por qué? Porque el agua constituye aproximadamente el 50 % de nuestra sangre, que actúa como una autopista en nuestro cuerpo.

La deshidratación puede afectar tu rendimiento antes que cualquier déficit calórico. Durante el ejercicio, el agua ayuda a la regulación térmica (sudoración) y se pierde mucha agua, ¡hasta 1,2 litros por hora en climas cálidos! Al sudar, esta pérdida de agua espesa la sangre, lo que sobrecarga el sistema cardiovascular. Y, si ingieres calorías durante este tiempo y no tienes un equilibrio hídrico adecuado, tu sistema gastrointestinal comenzará a extraer agua de la sangre y del resto del cuerpo para procesarlas. Esto crea un volumen sanguíneo extremadamente bajo que reduce la capacidad de las células sanguíneas para transportar oxígeno y nutrientes a los músculos. ¿El resultado? Aumento de la frecuencia cardíaca, aumento de la temperatura corporal, disminución del gasto cardíaco, disminución de la concentración mental, vaciado gástrico retardado y malestar gastrointestinal. ¡Uf!

Aunque puede ser difícil saber con exactitud cuánta agua pierdes durante el ejercicio y reponerla adecuadamente, muchos investigadores sugieren beber entre 590 y 700 ml de agua por hora para minimizar los efectos de la deshidratación y el malestar gástrico. Por eso, Tailwind recomienda beber entre 590 y 700 ml de agua por hora mezclado con nuestro Endurance Fuel para minimizar el riesgo de deshidratación y tener la mejor oportunidad de terminar tu carrera (o tu ascenso épico) sintiéndote fuerte y con energía.

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